El galardón lo ha recogido Mireia Torres, directora de Innovación y conocimiento de la bodega y presidenta de la Fundación Familia Torres, en un encuentro que ha tenido lugar en la bodega Waltraud, en Pacs del Penedès. Mireia Torres ha destacado que con Mas Albornà ha habido “una colaboración continuada de más de 45 años que ha ido más allá de la de un cliente-proveedor convirtiéndose en una relación más cercana, de partner de confianza y estratégico”.
El galardón ha sido elaborado en uno de los talleres ocupacionales de la Fundación con el fin de infundir el ADN social de la Fundación hasta el último detalle y crear un símbolo que reconoce el compromiso de las empresas que, conjuntamente con Mas Albornà, construyen juntas un Penedès con más compromiso social.
Historia de una relación de éxito
La relación entre la Fundación Mas Albornà y Familia Torres empezó en Navidad del año 1978 cuando contrataron los servicios del área de manipulados de la Fundación como apoyo extraordinario para hacer el encajado de las botellas de los lotes de Navidad. Una medida que acabó convirtiéndose en un apoyo externo recurrente y, con el paso de los años, en una historia referente de colaboración y compromiso social en el Penedès.
De los primeros trabajos de encajado de botellas, se pasó a realizar otras tareas de continuidad tanto el área de manipulados (etiquetado, limpieza de botellas, promociones...) como en otras, como por ejemplo apoyo a la cocina del restaurante o el premiado y reconocido proyecto educativo inclusivo “Viu la Vinya”.
Esta relación sostenida en el tiempo llevó a una relación de cliente-proveedor muy estable, firme y basada en la confianza, hasta el punto de que se firmó el primer contrato de servicios externos que tuvo lugar en Cataluña, un servicio que permite que un equipo profesional del Centro Especial de Empleo desarrolle una actividad productiva en las instalaciones de Familia Torres, bajo la supervisión de un responsable que actúa como enlace entre la empresa y la fundación.
La relación entre Familia Torres y Mas Albornà no solo ha generado oportunidades laborales para personas con discapacidad, sino que también ha contribuido a una inclusión social efectiva, con cuatro trabajadores que han pasado a formar parte del equipo de Torres de forma permanente. A su vez, el compromiso de la Familia Torres a la inclusión ha sido un referente positivo y un impulso para la contratación social en el territorio.
Familia Torres ha demostrado una sensibilidad social destacada, confiando en las capacidades de los trabajadores/as de Mas Albornà y apoyando continuamente a la Fundación. Su integración como miembros del patronato desde 2006 refleja este profundo compromiso con la misión de la Fundación Mas Albornà, el territorio y las personas.
Ésta es, pues, una historia de éxito que se define por una estrecha y sincera colaboración que, después de 46 años, sigue bien viva representando que el trabajo conjunto para fomentar la inclusión social y laboral genera un impacto positivo tanto en nivel empresarial como social.