Situada en el corazón del Penedès, en la subzona Turons de Vilafranca, y delimitada por el río Foix y la riera de Llitrà, el viñedo de 29 hectáreas se distribuye en diez parcelas y dos niveles, con suelos arcillosos en la parte baja y predominio de margas en la parte alta. Aquí las viejas cepas de cabernet, plantadas en la década de los sesenta, han arraigado bien y producen vinos equilibrados, influidos también por el clima mediterráneo. Mas La Plana es hoy un ecosistema natural lleno de vida gracias a la viticultura regenerativa cuyo objetivo es recuperar la fertilidad natural del suelo, evitar su erosión y fomentar la biodiversidad, al tiempo que aumenta la capacidad del viñedo de absorber CO2 atmosférico contribuyendo en la lucha contra el cambio climático.