EL PATRIMONIO MATERIAL DE LA VIÑA (I)

10 Julio 2018

Castillos y ermitas, murallas milenarias y viejos pagos romanos visten de vetusta piedra y solemne estoicidad ante el paso del tiempo a las vides que nos vieron nacer como elaboradores.

Un legado material cuya génesis nos retrotrae a los primeros pobladores; antiguas civilizaciones y órdenes religiosas; pioneros todos en la identificación de las parcelas idóneas para el cultivo de la vid.

Purgatori: Historia viva que nos contempla

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Bajo estas premisas y contexto, en Familia Torres hemos terminado recientemente la construcción de Purgatori; nuestra nueva bodega en Costers del Segre, ubicada en el histórico Mas de l’Aranyó del s. XVIII, en Les Garrigues (Lérida). Purgatori afianza el proyecto de la familia en esta zona de larga tradición vitivinícola, iniciada hace casi veinte años con la adquisición de una finca de 870 hectáreas.

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Barricas Bodega Purgatori
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Purgatori Interior

Con el objetivo de recordar a los monjes de Montserrat que habitaron el lugar a partir del año 1770, la bodega conecta con la antigua cava subterránea donde sus primeros residentes elaboraban y guardaban su vino. Una conexión que trasciende el tiempo de la que ocuparse y preocuparse. De ahí que también se haya rehabilitado parte del edificio histórico anexo, haciendo del antiguo comedor de los monjes una sala de catas, cargada de historia y conocimiento. Purgatori se suma así a las fincas históricas de la Familia Torres.

“Con esta nueva bodega, recuperamos el pasado vinícola de esta histórica finca, en la que durante muchos años se había elaborado vino. Queremos rendir homenaje a todos aquellos que nos precedieron en este lugar, y en especial a los primeros habitantes, los monjes que supieron ver el potencial vinícola de esta tierra”.

Miguel Torres Maczassek

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El pasado mes de Junio abrimos por primera vez las puertas a un pequeño grupo de personas, con las que pudimos visitar la bodega y realizar una pequeña cata, con Josep Sabarich (enólogo y responsable de la bodega) y Miguel Torres Maczassek, del vino Purgatori en sus últimas 2 añadas, a más de otro vino elaborado a partir de una variedad ancestral recuperada, gonfaus, cultivada en el mismo viñedo de l’Aranyó.

Es nuestra responsabilidad como bodega mantener y rehabilitar tal riqueza patrimonial; gestionarla como un eje vertebrador del territorio; dotándola de una nueva vida útil y procurando una mayor accesibilidad a ella; un actor dinamizador de la región, un elemento de integración que da vida al territorio y que se sirve de la convergencia social para proyectarse al mundo desde el atalaya de la historia.